Foto: Fernando Racing. |
En el marco de la segunda
fecha de APAC 1.4, disputada en el Autódromo de Buenos Aires, la platense entró
en la historia de la categoría. Luego de arribar tercera en la final inicial,
se adjudicó la segunda competencia y se anotó como la primera mujer en vencer
dentro de la categoría. En dialogo con Seis en Línea, Romina, quien hace
binomio con Damián Horehled, compartió sus sensaciones tras la memorable
jornada.
“Es
una sensación increíble, hace nueve años que corro y vengo luchando por
conseguir esto. Fue un fin de semana excelente, anduvimos bien desde el
principio e hicimos podio en la primera final; lo que siguió fue un regalo, mi
primera victoria en la categoría y en mi carrera. Realmente se trabaja mucho
para esto, tanto en lo económico, en lo físico como en el auto.”,
aseguró.
-¿Cómo
viviste las dos carreras del domingo?
-Fueron competencias muy
peleadas donde me fui metiendo en la pelea y pude avanzar. En la segunda final
largué octava, rápidamente caí al lugar doce y busqué remontar hasta donde
pudiera. Nunca me di cuenta que había ganado, pensé que habría otro piloto más
adelante.
Foto: Seis en Línea. |
-El pensamiento machista me
molesta muchísimo, es algo con lo que lucho día a día, en el automovilismo y en
la vida. El objetivo es demostrarme a mí misma que puedo. Ojalá sea un
incentivo para mis compañeras, yo se que pueden y no son menos que nadie. Al
ser pocas nos cuesta hacernos notar pero hay que seguir insistiendo y no bajar
los brazos.
-Este
gran fin de semana también sirve para recuperar terreno en el campeonato y acomodarse
adelante. ¿Cómo siguen de ahora en más?
-Todavía no pensé en eso
pero a principio de año la idea era entrar al play off y pelear el título.
Indiferentemente de que lo ganemos o no, queremos tener chances hasta el final
y sentir la linda sensación de luchar por un campeonato. Después de que pasen
los festejos y la emoción, vamos a trabajar para lo que sigue.
-¿A
quién hay que agradecer?
-A mi familia, mis papás y
mi hermano, por todo el esfuerzo que hacen. A Damián, mi novio, que es un pilar
y siempre me insiste para seguir. También a la familia Rizzo, todos los que
ayudan en el auto y aquellos que siempre se alegran por mis logros.